¿Cómo solucionar los problemas?

«Todo el mundo tiene problemas» es una frase que solemos decir y escuchar. Pero ¿por qué sabiendo eso, mi problema me genera mucho sufrimiento?, ¿por qué si observo a otros considero que lo mío no es tan grave, pero me afecta de todos modos?
En esta oportunidad vamos a hablar de resolución de conflictos. A continuación, planteo algunas estrategias para decidir la mejor solución o una solución óptima a la situación.

A veces un mismo problema genera mucho sufrimiento y estrés a una persona, pero no así a otra. En el segundo caso, la persona puede tener facilidad para encontrar solución o pareciera no darle la importancia que le damos nosotros.
Para encontrarle solución a nuestros problemas podemos guiarnos con los siguientes pasos:

– Detectar el problema que está causando el conflicto.
– Descomponer el problema en partes más pequeñas.
– Identificar el evento que desencadena el conflicto y el impacto específico que está causando.
– Decidir si se debe resolver el conflicto o abandonarlo. Para esto nos podemos preguntar ¿es el conflicto lo suficientemente importante como para plantearlo? Si no intento resolver este problema, ¿me llevará a tener sentimientos de enojo y resentimiento?
– Pensar en la manera de afrontarlo.
– Tener en cuenta las consecuencias positivas y negativas que desencadenaría mi comportamiento.
– Modificar aspectos cognitivos como la visión negativa con respecto a situaciones problemáticas (p. ej. creencias erróneas sobre el origen del conflicto o atribuciones sobre quién es la persona responsable del origen del conflicto).
– Reconocer los sentimientos asociados con el conflicto.
– Reflexionar sobre las expectativas que tenemos en solucionar ese conflicto.
– Evaluar nuestra capacidad de solución.
– Realizar un auto reforzamiento: observar y registrar la propia conducta, de tal manera que se pueda identificar si ha alcanzado la meta específica.

Estos pasos facilitan encontrar una solución óptima a un problema, pero no implica que siempre haya soluciones. A veces tenemos que atravesar problemáticas que no dependen de nuestra capacidad de resolución. En estos casos tendremos que reflexionar sobre la enseñanza que nos puede dejar ese evento adverso.